viernes, 30 de septiembre de 2011

Un templo bajo la roca

El templo de oro de Dambulla está construido dentro de un complejo de cuevas en la zona cenetral de Sri Lanka.
 

El complejo de cuevas del templo, se encuentra debajo de un bloque de roca de 160 metros de altura que se eleva en un área llana. El lugar fue habitado desde tiempos prehistóricos, pero con la llegada del budismo a la isla, varias cuevas de Dambulla se utulizaron para construir templos, y en su interior fueron decorados con estatuas de Buda, de reyes srilanqueses, de dioses y diosas hinduistas. 
Las vistas desde su exterior, con vistas de los templos que parecen estar al límite de ser aplastados por la roca, son impresionantes:







El templo es un complejo de monasterios y santuarios budistas que afortunadamente, está muy bien conservado, un fiel exponente de la arquitectura troglodita y el más importante templo budista de Sri Lanka.

El muro entre Arabia Saudí y Yemen

 
   Oleoducto en el desierto, parte de la barrera saudí


Arabia Saudí es, de lejos, la economía más poderosa (y con las reservas de crudo más grandes) de todos los estados del Golfo. Como tal, ha venido recibiendo cada año enormes cantidades de inmigrantes ilegales (unos cuatrocientos mil), muchos de los cuales entraban a través de Yemen, un país al que la lotería petrolífera le otorgó un premio mucho menor que a su vecinos, y que debido a eso y a la desmesurada corrupción, es mucho más pobre que sus vecinos del Golfo. 
Diariamente llegan a Yemen refugiados de Etiopía o Somalia; con una tasa de desempleo del 35%, el país no ofrece mucho futuro, así que muchos de ellos toman la vía Saudí, o se dirigen a Omán y de ahí a otros estados más ricos. 
Así las cosas, en 2003 Arabia Saudí comenzó la construcción de una barrera de 75 km de longitud, consistente en una muralla de sacos de arena sujetando un oleoducto, todo ello reforzado con hormigón armado. 
El gobierno yemení protestó alegando la violación del tratado de fronteras, y la tiranía saudí paró el proyecto. 
El contrabando de armas e incluso de niños no cesó, como tampoco lo hizo la entrada de inmigrantes (sólo en 2007 Arabia Saudí deportó a 65.000 yemeníes), por lo que en 2008 se retomaron los trabajos, no sin resistencia por parte de la policía de fronteras de Yemen. 
Está previsto completar una barrera a lo largo de los 1.800 kilómetros de frontera con Yemen, pero no sólo eso. La casa Saudí ha lanzado un proyecto para amurallar todo el país, ya sea con verjas físicas o con medidas de control electrónico y por satélite, que les costará del orden de tres mil millones de dólares. Para el gobierno que más dinero ingresa del mundo por la venta de petróleo, calderilla.

El muro entre Uzbekistán y Afganistán

En un nivel comparable al de la frontera Indopakistaní o la zona entre las dos Coreas, la frontera entre Uzbekistán y Afganistán es una de las más militarizadas del mundo. 
 
El muro que Uzbekistán construyó a lo largo del límite afgano consiste en 200 kilómetros de verja coronada por alambre de espino y una segunda verja electrificada, todo ello reforzado con minas antipersona y patrullas armadas. Su construcción comenzó con la guerra civil afgana que llevaría a los talibanes al poder, y se reforzó en 2001, poco después de los atentados del 11 de septiembre. 
 
Existe un único paso fronterizo hacia Afganistán, a través del llamado, sin ironías, “Puente de la amistad”. 
Entre 1997, cuando la ciudad afgana de Mazari Sharif cayó en manos de los talibanes, y 2001, cuando EE.UU. y la ONU invadieron Afganistán, el puente, construido por los soviéticos en 1982 para suministrar a sus tropas en el país, permaneció cerrado.
 
La verja fronteriza vista desde Uzbekistán

  
El llamado Puente de la Amistad, custodiado en el lado afgano por tropas internacionales 

Un cartel en la verja uzbeka